La erupción del volcán Tajogaite comenzó en la isla de La Palma el 19 de septiembre de 2021, extendiéndose durante 85 días. Este estudio tiene como objetivo presentar el diseño y la metodología de la cohorte ISVOLCAN (Impacto en la Salud de la Población de La Palma debido a la Erupción Volcánica), así como los hallazgos preliminares de los primeros 1002 participantes inscritos. En medio de los acontecimientos tumultuosos, se inició este estudio exhaustivo para investigar los impactos profundos de este evento volcánico en la salud y el bienestar de la población local. Este estudio se propone elucidar la compleja relación entre la actividad volcánica y la salud pública, arrojando luz sobre su diseño, metodología y hallazgos iniciales. En este artículo, ofrecemos una visión general del marco del estudio y brindamos un vistazo a las primeras percepciones obtenidas a partir de la participación de los primeros 1002 individuos.
Se realizó un estudio prospectivo de cohortes con una selección aleatoria de participantes adultos de la población general, con un tamaño de muestra estimado de 2.600 individuos. Se presentan los resultados de los primeros 857 participantes, junto con los de un grupo de 145 participantes voluntarios que actuaron como intervinientes durante la erupción. Se recogieron datos sobre epidemiología y exposición al volcán, y los participantes se sometieron a exámenes físicos, que incluyeron antropometría, medición de la presión arterial, espirometría y extracción de sangre venosa para evaluación toxicológica.
En la población general (n = 857), el análisis descriptivo reveló que los participantes eran principalmente de mediana edad (50,8 ± 16,4), con predominio de mujeres. Antes de la erupción, los participantes vivían a una distancia media de 6,7 km del volcán en la región occidental y de 10,9 km en la región oriental. Alrededor del 15,4% de la muestra tuvo que ser evacuada, y el 34,8% regresó a casa al cabo de una media de 3 meses. Un número significativo de participantes declaró haber realizado tareas cotidianas de limpieza de cenizas volcánicas en interiores y exteriores. Los síntomas agudos notificados con más frecuencia fueron irritación ocular, insomnio, trastornos del estado de ánimo (ansiedad-depresión) y síntomas respiratorios. Los resultados del análisis multivariante mostraron que los participantes de la región occidental tenían más probabilidades de presentar síntomas de las vías respiratorias inferiores (OR 1,99; IC 95%:1,33-2,99), depresión y ansiedad (OR 1,95; IC 95%:1,30-2,93) e insomnio (OR 2,03; IC 95%:1,33-3,09), en comparación con los de la región oriental.
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