Entrevista con Anita Villacís PhD.
Docente investigadora de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador
Encargada del insectario del CISeAL
En la imagen: Anita Villacís PhD., encargada del insectario, en compañía de Santiago Cadena, técnico de laboratorio.
¿Qué es un insectario?
El insectario es un tipo de museo para exhibir insectos vivos o muertos. Los insectarios muestran a menudo una cierta variedad de insectos, así como artrópodos. El insectario constituye la base para la cría y el mantenimiento de insectos que se utilizan con fines investigativos, de docencia u otros. Por ejemplo, los insectos muertos se les puede montar con un alfiler y colocarlos en cajas entomológicas para su observación. Mientras que los insectos vivos pueden estar en recipientes tratando de simular las condiciones óptimas de donde fueron recolectados.
¿Por qué es importante contar con un insectario?
Uno de los principales objetivos de un insectario es que las personas puedan llegar a reconocer la importancia de los insectos en estudio. Es importante contar con un insectario, ya que en sus instalaciones se puede exponer insectos disecados con paneles explicativos o audiovisuales. Así, los alumnos y personal que visiten los insectarios podrán identificar las estructuras externas e internas de la morfología de los insectos. También podrán conocer cómo realizar la recolección, montaje, preservación de los insectos y de esa manera, aprender más sobre el hábitat natural, ciclos de vida, comportamiento, entre otras cosas.
En la imagen: Bianca Morejón, excolaboradora del equipo de Marco Neira PhD.
¿Cuáles son las características de un buen insectario?
Las características van a depender mucho de acuerdo con el tipo de insectos que se desea criar, mantener y mostrar. Para eso, también es importante conocer bien las características morfológicas, fisiológicas y de comportamiento de los insectos en estudio. Si las características son óptimas, se podrían realizar trabajos de ciclos de vida, comportamiento, morfometría, biología molecular entre otros. Según los insectos que queramos mantener debemos también tomar en cuenta condiciones físicas como incubadoras que simulen la temperatura de su hábitat, humedad y fotoperiodo de donde fueron colectados.
¿Cuáles son los usos que le da el CISeAL a su insectario?
Los principales usos que le da el CISeaL a su insectario son para fines de investigación operativa aplicada a la entomología médica; es decir, para el control de insectos transmisores de enfermedades (vectores). Se cuenta con material biológico vivo y muerto de algunos insectos. El material vivo dentro del insectario se utiliza para la crianza y mantenimiento de colonias bajo condiciones controladas de laboratorio. Con este material se puede acrecentar el conocimiento sobre ciclos de vida, comportamiento, preferencias lumínicas, resistencia a insecticida, entre otros. Mientras que, con los insectos muertos se puede realizar estudios de morfometría geométrica de alas y cabezas, como también de genética de poblaciones. Todos estos estudios que se realizan en el insectario del CISeAL permiten aumentar el conocimiento de los vectores, además de apoyar en la toma de decisiones para su control. Posteriormente, mediante publicaciones en revistas indexadas y de divulgación, se difunden estos resultados a la comunidad.
En la imagen: Juan José Bustillos, excolaborador del equipo de investigación de Sofía Ocaña-Mayorga PhD.
¿Se ha explorado el potencial del insectario del CISeAL para el control biológico de enfermedades en el país?
Los estudios que se realizan en el Insectario del CISeAL se enfocan en el control biológico de algunas enfermedades como el dengue, la malaria y la enfermedad de Chagas. Sin embargo, los protocolos de estos estudios dependen mucho de los insectos que estemos utilizando, no son los mismos ensayos para mosquitos (Anophelinos y Aedinos) que para triatominos (insectos que transmiten la enfermedad de Chagas). Por eso, es tan importante conocer el ciclo de vida y su comportamiento en general.
¿Qué medidas de bioseguridad se deben observar para trabajar en un insectario?
Existen normas de seguridad para trabajar en un insectario, pero eso depende de los insectos que se estén estudiando, por ejemplo, si son insectos que transmiten enfermedades se debería tomar en cuenta medidas de bioseguridad de nivel 2. Eso quiere decir, que deben cumplir con ciertas características, entre las que tenemos:
- El acceso al laboratorio limitado o restringido solo a personal autorizado y capacitado.
- Existen políticas, protocolos y procedimientos que aseguren que solamente el personal consciente del potencial riesgo, puede trabajar en esos lugares.
- Cuando se conoce que algunos de estos insectos son el vehículo de agentes infecciosos, se deben tomar en cuenta medidas de bioseguridad adecuadas (uso de guantes, mascarillas, gafas, gorro, mandil, entre otros materiales de bioseguridad).
- Para ingresar a trabajar en el insectario, es necesario que se lea el manual de bioseguridad y capacitarlo en la manipulación de esos insectos.
- No se puede beber, ni comer mientras se encuentra manipulando alguna de las especies de estos insectos.
- Por ejemplo, un insectario más sofisticado, puede tener puertas con cortinas de aire para la entrada a los insectarios, ya que es una de las primeras barreras que se necesita para evitar la fuga de insectos. Como segunda, barrera es tener los insectos en cuartos climatizados o incubadoras donde simulen la temperatura, humedad y fotoperiodo de los lugares donde se hayan colectado, todos ellos en recipientes, con las condiciones óptimas de trabajo y muy bien etiquetados.